7.27.2010

Hablando de los Nazis y Antisemitas


El siglo XIX es el siglo del nacionalismo: las luchas nacionales empujaron a los estudiosos a acrecentar el número de supuestas razas y subrazas. El énfasis mayor en Alemania se debe a dos razones: 1) Hasta 1870 sus muchas divisiones políticas internas habían incrementado el fervor nacionalista; y 2) la mayoría de los monarcas europeos eran de ascendencia germánica (recuérdese además que la monarquía dividía a la sociedad medieval en tres estratos: plebe, clero y nobleza, y ésta era considerada la superior, de "sangre azul").

El filósofo Johann Fichte enseñaba que el alemán era la lengua original de Europa (Ursprache) y los alemanes la nación original (Urvolk). Con todo, la visión de Fichte no se quedaba en la superioridad alemana y reflexionaba especialmente acerca de los judíos: "¿Darles derechos civiles? No hay otro modo de hacerlo sino cortarles una noche todas sus cabezas y reemplazarlas por otras cabezas que no contengan un solo pensamiento judío. ¿Cómo podemos defendernos de ellos? No veo alternativa sino conquistar su tierra prometida y despacharlos a todos allí. Si se les otorgan derechos civiles van a pisotear a los otros ciudadanos".

La lingüística. Ya desde los descubrimientos de William Jones en 1786 y la Ley de Grimm de 1822, se deducía de la afinidad entre el sánscrito, griego y latín, que había un origen común de idiomas indoeuropeos (incluídos celta y gótico, supuestamente el más antiguo de los germánicos). Se tuvo por cierto que las lenguas europeas derivaban del sánscrito, y las naciones que las hablaban pertenecían a la raza aria (que en sánscrito significa "noble").

El contraste de la llamada raza aria fue la "semita", de la que supuestamente derivaban las naciones que habían hablado lenguas semitas en el pasado. Lassen argüía que "los semitas no poseen el equilibrio armonioso entre todos los poderes del intelecto, tan característico de los indogermánicos" y su colega francés Ernest Renan condenaba "la espantosa simplicidad de la mentalidad semita". Todas las creaciones del espíritu humano (con la posible excepción de la religión) fueron atribuídas a los "arios" y por ello los alemanes, los más "puros", debían eludir mezclarse con razas inferiores. Debido a esa pretendida "pureza teutónica", los estudiosos alemanes optaron por la denominación indogermánica.

Durante la primera mitad del sigloXIX se hicieron muchos esfuerzos para racionalizar el odio. Bruno Bauer en Die Judenfrage (1843) denuesta el "espíritu nacional judío" y el compositor Richard Wagner escribe en La judería en la música (1850): "Debemos explicarnos por qué nos repele la naturaleza y personalidad de los judíos... Para compreder nuestra repugnancia instintiva por la esencia primaria del judío, consideremos primero cómo fue posible que el judío deviniera en músico..."

Las justificaciones científicas no provenían sólo desde lo sociológico. Un pionero que había pasado inadvertido fue Karl Grattenauer, quien en 1803 había ofrecido una explicación de vanguardia de por qué los judíos tienen mal olor: hay un fedor judaico producido por cierto amonium pyro-oleosum.

La creencia de que los judíos constituían una raza separada, oriental, se difundió ampliamente durante la segunda mitad del siglo pasado, y en Alemania se tradujo también al mundo de la política. Bajo gobierno de Bismarck, se entendió cínicamente que la judeofobia podía servir de instrumento para completar la unificación de Alemania. Como ironizara en retrospectiva Israel Zangwill (1920): "Si no hubiera judíos, habría que inventarlos para uso de los políticos... son indispensables como antítesis de una panacea; causa garantizada de todos los males". En efecto, a fines de siglo surgen en Alemania partidos políticos abiertamente judeófobos, con tres fundamentos ideológicos, a veces combinados: el económico, el religioso, y el voelkish (nacional-racial). Aunque al principio no tuvieron muchos afiliados, su propaganda seducía a grandes sectores de la población.

El primero en organizar el uso de la judeofobia como levadura para un movimiento de masas fue Adolf Stoecker en Berlín. Su Partido de Trabajadores Cristiano-Socialistas (1878) no atrajo votos con una plataforma de ética social cristiana, así que la cambió por una judeofóbica, que inspiró a todo un movimiento estudiantil antijudío a partir del Verein Deutscher Studenten de 1881. Con apoyo conservador, Stoecker fue electo al Reichstag. Para esa época se creaba la mentada Liga de los Antisemitas de Wilhelm Marr, dedicada ésta a temas étnicos más que a soioeconómicos. Y un famoso académico, Heinrich von Treitschke, les otorgó respetabilidad al denominar a todo exceso antijudío "una reacción brutal y natural del sentimiento nacional alemán contra un elemento extranjero". Treitschke acuñó la máxima Die Juden sind unser Unglück! ("-los judíos son nuestra desgracia!") que medio siglo después se transformó en lema de los nazis.

En 1882 se reunió en Dresden el Primer Congreso Antijudío, azuzado por un libelo de sangre en Tisza-Eszlar. Con delegados de Alemania, Austria y Hungría, creó la Alianza Antijudía Universal. Hubo más congresos en Chemnitz 1883, Kassel 1886 y Bochum 1889. Los racistas más pendencieros terminaron por escindirse del partido de Stoecker y en 1886 Otto Boeckel fue elegido al Reichstag como el primer judeófobo per se. A los pocos a¤os fundó el Partido Popular Antisemita, y dieciséis candidatos judeófobos fueron electos al Reichstag en 1893. En 1895, por primera vez en la historia, un partido llegaba al poder con una plataforma judeófoba. Fue el Partido Social Cristiano de Viena, cuyo líder, Karl Lueger, mientras era burgomaestre de la ciudad, recibió la visita de un joven admirador llamado Adolf Hitler.

También a principios de esa década se propuso la doctrina de la judeofobia racial. Para su iniciador, Eugen Dühring "habrá un problema judío aún si cada judío le da la espalda a su religión y se une a una de nuestras principales iglesias... Son precisamente los judíos bautizados los que penetran más profundamente... los judíos deben ser definidos solamente en base de la raza".

En 1899 Houston Chamberlain (yerno de Wagner) elaboró cabalmente la antítesis ario-semita en Los fundamentos del siglo XIX, voluminoso manual de los académicos judeófobos, que explicaba cómo desde la antigüedad "...los arios cometieron el fatal error de proteger a los judíos (bajo el rey persa Ciro) y así permitieron que el germen de la intolerancia semítica esparciera su veneno por la Tierra durante milenios, una maldición contra todo lo que es noble y una vergüenza para el cristianismo". No todos los racistas coincidieron en esto. Por ejemplo, los neopaganos como Alfred Rosenberg y Walter Darré, consideraron el cristianismo como una ense¤anza "típicamente semítica" que socavaba el espíritu "germánico" por medio de una mentalidad de esclavos. Esas diferencias acerca de qué es ario y qué es semita, fue precisamente el problema que nunca resolvieron los racistas.

Su solución fue simple: todo lo bueno era apropiado para "los arios" y lo malo era "semita". Para Chamberlain, por ejemplo, el ideal era el nórdico rubio y dolicocéfalo, entre los que no dudó en incluir nada menos que a Dante Alighieri, e incluso al Rey David y a Jesús. Pero como los gustos de los racistas variaban, algunos resultados de su método fueron tragicómicos. Goethe por ejemplo, era para Chamberlain un "ario perfecto y puro"; para Fritz Lentz, un "híbrido teutónico-asiático"; para Otto Hauser, "un mestizo, puesto que en el Fausto hay centenares de versos lastimosamente malos".

Sin duda aquí radica la paradoja de este racismo: en la vastísima literatura acerca del "veneno judío", y a pesar de la enorme infraestructura montada para combatirlo, no se dio jamás una definición racial del judío. Nunca llegaron más allá de definirlo como alguien cuyos abuelos profesaron la religión judía. Así y todo, algunos fanáticos construyeron sistemas escatológicos muy elaborados en los que la lucha entre la raza aria y la semita era la contrapartida de la lucha final entre Dios y fuerzas diabólicas.

El hecho es que para 1900 la existencia de una raza aria era tenida por la mayoría como una verdad científica, y ya había todo un enorme aparato teórico que denunciaba la "influencia judía" en el arte, las leyes, la medicina, filosofía, literatura, etc. Un ejemplo particularmente escandaloso (aunque menor) fue la obra del campeón mundial de ajedrez Alexander Alekhine, Ajedrez ario contra ajedrez judío en la que se sostiene que los judíos juegan al ajedrez de un modo distinto, hiperdefensivo y oportunista.
Si consideramos que los postulados judeofóbicos raciales habían penetrado por doquier en Alemania, se entiende el meteorítico crecimiento del nazismo, sobre todo si agregamos la simplicidad de su postura maniquea, que seduce a las masas. De veinte mil afiliados en 1923, el Partido Nazi recibió en 1930 dos millones y medio de votos, elevando a sus representantes en el Reichstag de 12 a 107. Dos a¤os después, ya eran 230. Cuando ascendieron al poder en 1933, el dogma judeófobo era una mitología filtrada en todos los órdenes de la vida, que sirvió para justificar el Holocausto.

El insulto a los judíos servía para enseñar a la juventud alemana el rechazo del pacifismo sentimental. Los maestros lo hacían en clase reprimiendo "debilidades" de otros niños. Siglos de odio acumulado se descargaron contra una población indefensa atrapada en Europa. El judío ya no era el chivo emisario, ni siquiera un miembro de una raza inferior. Era el culpable de todo mal: la derrota alemana en la Gran Guerra (tal acusación era llamada "la teoría de la pu¤alada en la espalda"), la inflación, el crimen, todo. El judío era el destructor inherente, el envenenador de la pureza. Y era incorregible. Sólo restaba una "Solución Final", que el slogan nazi explicitó claramente: Juda Verrecke! (judería, pereced!).

Al comienzo se fingió legalidad, se simuló autodefensa nacional. Luego el programa se aceleró: aislamiento, pauperización, expulsión, exterminio. Pero incluso antes de que el gobierno actuase, las tropas de asalto nazis, la policía y los afiliados del partido tomaron la acción en sus propias manos. Las golpizas, los boycots económicos, y los asesinatos de judíos fueron experiencias cotidianas. Se condenó al ostracismo a los judíos que ejercían como abogados, médicos, maestros, periodistas, académicos y artistas. Los ni¤os judíos eran insultados en las escuelas, por compa¤eros y por maestros, y regresaban a sus casas golpeados, pálidos y temblorosos. Una estrella amarilla debia exhibirse en la ropa, los libros de judíos eran incendiados en público.

Antes de que concluyera 1933, los judíos alemanes eran hombres desesperados, mujeres sollozantes y ni¤os aterrorizados. En septiembre de 1935 las Leyes de Nürenberg cancelaron la ciudadanía de todos los judíos, quienes pasaron a ser "huéspedes". La única salida era la emigración o el suicidio. Se limitó la salida de bienes del país, y para 1938 no podía sacarse ni siquiera un marco. Esta medida enriquecía al gobierno con cada partida, y también hacía del judío un inmigrante aun más indeseable en los países a los que presentaba su solicitud.

La Noche de los Cristales (10/11/1938) fue el horror: ultrajes, asesinatos, saqueos y violaciones. Los judíos corrían presas del pánico mientras hordas de nazis los perseguían. Más de cien judíos fueron asesinados, treinta y cinco mil arrestados (y eventualmente enviados a los campos de muerte), siete mil quinientos negocios saqueados y seiscientas sinagogas incendiadas, mientras los altoparlantes anunciaban: "se requiere de todo judío que decida colgarse, que tenga la amabilidad de colocar en su boca un papel con su nombre, para que sea identificado". El Holocausto había comenzado.

Por Jünge.

7.26.2010

30 Julio: Fiesta con causa

Amigos y amigas

Los hechos y las circunstancias no importan, lo que si importa es que dos de nuestras amigas están privadas de su libertad.

No es justificación, pero la pobreza, desesperación y la falta de empleo pueden hacer que enfrentemos a la vida con falta de criterio e imprudencia. No es licito robar, pero el castigo puede ser desproporcionado cuando se enfrenta uno a la prisión masculina siendo una mujer transexual.

Karol y Lucy necesitan nuestra ayuda. Estamos reuniendo recursos para el pago de la fianza por sanción pecuniaria y obligación procesal. Con ello recuperaran su libertad.
 
30 Julio Fiesta TVMEX con Causa

CLUB & LOUNGE "IL PECATO"
Ubicado en la planta baja del Hotel Bojorquez.
Av.1 de Mayo # 15, casi esquina con Periférico. A 5 minutos del metro Toreo

Admisión $100.00 Con una copa de cortesía.
Horario: 9 pm a 5 am.
Música continúa tipo discotheque.
Bebida.
Base de taxis a la salida del hotel.
Vallet Parking con estacionamiento $35.00

Evento para la toda la comunidad LGBT
Parte de los recursos obtenidos servirá para el fondo de apoyo a dos compañeras trans detenidas en un reclusorio varonil, con los recursos obtenidos lograremos su libertad.

Para mayor información.
Rocio Suárez.
Equipo de Planeación TVMEX
Cel 5527538095
rocitvmx2004@ yahoo.com. mx

7.06.2010

McDonalds

  
   Según autorizadas de la UE de Michigan, trascendió recientemente, que la carne que utiliza McDonalds para sus hamburguesas, proviene de unos auténticos bultos sin patas y sin cuernos, que son alimentados por medio de tubos conectados a sus estómagos y que de hecho no tienen huesos, sino un poco de cartílagos que nunca llegan a desarrollarse.

Quienes los han visto, aseguran que son cosas muy desagradables, pues además de permanecer inmóviles toda su "vida", no tienen ojos, ni cola y prácticamente no tienen pelo; de hecho, su cabeza es del tamaño de una pelota de tenis y lo único que sobresale es lo que les queda de "boca". La manipulación genética de la cual son resultado, los convierte en verdaderas cosas inanimadas con una horripilante apariencia gelatinosa.

Cuando el gobierno intentó obligarlos a retirar de sus anuncios, que sus hamburguesas tenían carne de res, ellos argumentaron que en latín RES significa COSA, y que ellos producían carne de COSA, por lo que argumentaron que si podían decir que era carne de RES. Aunque dicho argumento es bastante rebatible y fraudulento, se dice que con todo el poder económico que los respalda, habrían sobornado a muchas personas, en diversos puestos, a muy altos niveles gubernamentales. 

Por eso, McDonalds se permite el lujo de anunciar que lo que le meten a sus hamburguesas es 100% carne de RES, o sea carne de "COSA", es decir, de esas cosas que se sabe hacen crecer en pseudo establos y con procedimientos de dudosa ética. Pero NUNCA verán que exista ninguna leyenda o anuncio en donde McDonalds diga que la carne que utilizan es de "Ganado Vacuno", que es el nombre apropiado para designar genéricamente a toros y vacas. 

Sacado de: rompecadenas.com

7.01.2010

Dejemos de hacernos pendejos

¿De qué va todo esto? 

DHP (Dejemos de Hacernos Pendejos) cuyo lema es: México no va bien, dejemos de hacernos pendejos, hagamos historias que cambien la historia. Básicamente DHP es un  un movimiento ciudadano catalizador de ideas, un grupo que provocan nuevas iniciativas. Se quiere que los ciudadanos reaccionen, mediante formas imaginativas y creativas, lograr empoderar al ciudadano. Porque los ciudadanos son los que tienen el poder sobre este paìs utilizando a los politicos, policias, a todos, sólamente que estos "medios" se han rebasado en su propio papel.

En DHP se quiere innovar la forma en cómo se relaciona la ciudadanía con la política, pasando de las quejas pasivas a la acción, porque todo mundo se queja pero ¿Quién hace algo?. Que los ciudadanos retomen lo que les pertenece, el espacio público; y que seamos todos capaces de influir en la toma de decisiones públicas. Esto sólo se puede lograr construyendo nuevas formas de actuar, con nuevas formas de organización que promueven el cambio desde el interior de las personas, y hacia afuera, para así lograr ejercer presión en las autoridades

Integrate http://dejemosdehacernospendejos.org/Somos.php

Segunda etapa de propuesta: 500sobre500, quinientos ciudadanos sobre 500 diputados para monitorearlos y que cumplan con su trabajo. No todos los politicos son accesibles y no responden pero hay otros que sí ¡¡Espiemos!!